• Español
  • English
  • Viendo jugar a OKC a lo largo de los playoffs, me sorprendía lo que le cuesta a un equipo top jugar con dos interiores puros a la vez, como se podría considerar que son Chet Holmgren y Isaiah Hartenstein. Sin ir más lejos, el proyecto que más apostaba por jugar con dos «grandes» hasta el año pasado, que era Minessota con la dupla Towns-Gobert, acabó disolviéndose con el traspaso que acabó con Randle en Minneapolis y el francés en «La Gran Manzana». A partir de ahí, me pregunté, como había ido evolucionando el juego de cara a canasta de los jugadores de la NBA con el paso de los años. Lo que a principio de siglo se veía como extraño, un interior saliendo a tirar triples, ahora se ha convertido ya en una habilidad que la gran parte de jugadores altos poseen.

    Con esta idea en la cabeza, me puse a pensar como echarle un vistazo a estos cambios en el juego de los jugadores. La mejor forma desde un inicio me pareció acudir al desglose de tiros del que dispone la NBA. A partir de ahí, empecé contabilizando la cantidad de tiros de cada jugador por temporada, y los separé utilizando la propia información que nos aporta la liga que divide los lanzamientos en 5: Back Court Shot, Less Than 8 ft, 8-16 ft., 16-24 ft., y 24+ ft. Para hacer este análisis sin datos que contaminasen el estudio, me quedé con las combinaciones de jugador y temporada donde había al menos 300 tiros, y analicé las proporciones en los que los tiros estaban repartidos. Con esto, extraje las desviaciones estándar entre las distribuciones de cada jugador y las comparé para aquellos jugadores con al menos 5 temporadas disponibles.

    Con esto, apoyándome en los gráficos de los mapas de calor vamos a analizar aquellos 5 jugadores actuales que más han variado su estilo de juego a lo largo de los últimos 10 años explorando su distribución de tiro.

    TOP 5: Al Horford

    El quinto puesto de este ránking se lo lleva Al Horford. Y se lleva probablemente el quinto y no el primero, porque el análisis es de los últimos diez años y no de los últimos quince. El interior, pasó sus primeras 9 temporadas en los Atlanta Hawks, donde pasó de ser un jugador puramente interior, con 29 triples intentados a lo largo de sus primeras 7 temporadas a empezar a utilizar el lanzamiento exterior con más asiduidad en su última campaña en el equipo, tal y como se puede ver en el primer gráfico, siendo un habitual del lanzamiento de media distancia y el triple frontal.

    Desde ahí, tras su fichaje por Boston, se convirtió en un tirador solvente, llegando a promediar un 43% en la temporada 2018-19. A partir de ese desempeño, Philadelphia apostó por él firmandole un contrato muy importante para la época, 109M por 4 años. Tras el primer año, donde no terminó de funcionar, promediando un 35% desde la línea de 3, que era su principal arma ofensiva, fue traspasado a OKC para aliviar el espacio salarial de la franquicia de Pensilvania. Boston apostó de nuevo por él, y los resultados no han podido ser mejores. Ha ido poco a poco abandonando el tiro de media distancia para acabar de definirse como un triplista, como se puede ver de forma clara en los últimos gráficos, obteniendo muy buenos números desde ahí, con un 45% en la 2022-23 como mejor actuación.

    Top 4: P.J. Tucker

    P.J. Tucker es otro ejemplo de como la edad y la veteranía te hacen ir adaptando tu rol dentro la franquicia a la que perteneces. Hace diez años se encontaba en Phoenix, ejerciendo el rol de alero titular en unos Suns que vagaban a la deriva, terminando con un record de 23-59. A lo largo de estas temporadas, su rol de excelente defensor era el que predominaba, aunque en ataque tenía muy repartido su tiro, con una especial devoción al que ha sido el más utilizado a lo largo de su carrera, el triple desde la esquina.

    En la temporada 2017-18, Daryl Morey apostó por él para unos Rockets que, a manos de Mike D’Antoni, eran un auténtico equipazo. En el tiempo que estuvo en la franquicia, P.J. fue abandonando poco a poco el tiro de media distancia para incrementar el volumen en su triple frontal, poco utilizado en los años anteriores de su carrera. En los últimos años de esta, el rol del alero ha estado cada vez más alejado del centro del campo, enfoándose en el tiro de las esquinas y bajo el aro, tan carácterístico de su perfil 3&D.

    Top 3: Brook Lopez

    El caso de Brook Lopez es similar al de Horford en la idea de interior reconvertido a triplista. Durante sus primeras ocho temporadas en la NBA, todas ellas en los Nets, acumuló un 3/35 en triples, que demostraba que no era su faceta de juego preferida. No fue hasta la temporada 2016-17 cuando se produjó el cambio drástico, de lanzar 14 triples la temporada anterior a 387, más de cinco por encuentro disputado.

    Fue ya cuando recaló en los Bucks cuando se produjo el definitivo sorpasso, más lanzamientos triples que de dos a lo largo de una temporada regular, un dato tremendamente particular para ser un pívot. El lanzamiento de 3-4 metros que había utilizado tanto en los Nets, había sido totalmente sustituido por el lanzamiento triple, particularmente el frontal. En los últimos años, la tendencia ha seguido siendo similar, gracias a su embergadura utiliza con frecuencia en tiro a menos de dos metros, y después ya se centra en los triples, la mayoría de ellos frontales, aunque con preferencia de tender hacia la zona izquierda de la línea de 3 respecto a la derecha.

    Top 2: Isaiah Stewart

    Para llevar únicamente cinco temporadas en la mejor liga del mundo, el mapa de calor de Isaiah Stewart es cuanto menos particular. Tras las dos primeras temporadas donde no llegó a promediar un triple lanzado por partido, durante las campañas 2022-23 y 2023-2024 se fue rondando los 4 intentos, probablemente generado por los minutos compartidos en la pista con Jalen Duren, recién drafteado. Este pasó a gestionar la posición de center puro dentro de la plantilla de Michigan, lo que recaló en un estilo de juego más abierto para Stewart, donde subieron sus intentos desde el exterior.

    ¿Lo curioso de esto? La vuelta al estilo de juego de los primeros años durante esta última temporada. El factor parece claro, pasar de ser titular al 4 a rotar de suplente al 5 con Duren, lo cual genera ese mayor juego interior y por ende, el abandono de su faceta más tiradora. Veremos durante los próximos años, hacia que rol se acaba decantando, habiendo visto ya dos facetas distintas en su juego durante este tiempo.

    Top 1: Julius Randle

    El caso Randle también es cuanto menos curioso. Durante sus años en LA, frecuentaba el tiro de media distancia, sin probar mucha suerte con la larga, promediando menos de un intento desde el triple por partido. No fue hasta su llegada a Nueva Orleans en la campaña 2018-19, cuando empezó a aventurarse desde la larga distancia, siendo sus porcentajes desde fuera del arco bastante justos hasta la llegada a Nueva York, promediando números por debajo del 30% en la mayoría de campañas.

    Fue en la temporada 2020-21 cuando su volumen y sus aciertos subieron hasta superar los 8 intentos por partido en la temporada 2022-23. Durante estos últimos años, hemos podido observar como ha ido poco a poco desapareciendo el tiro de media distancia con el que contaba en sus primeras temporadas en los Knicks, hacia un juego cada vez más exterior, complementando su juego con otro jugador interior, como han sido Isaiah Hartenstein, Mitchell Robinson, o ahora en Minessota, Rudy Gobert.

    ¿Te esperabas estos resultados? Déjanos en comentarios algún otro ejemplo de cambio en el estilo de juego que esperabas en esta lista. Y sobre todo, muchas gracias por leernos 🙂


    Descubre más desde SospiAnalytics

    Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

    por Sospi01

    Deja una respuesta

    Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

    Descubre más desde SospiAnalytics

    Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

    Seguir leyendo